El ciclo Construir, Medir y Aprender es un modelo mental de la metodología Lean Startup que se utiliza para convertir las ideas de negocios en productos y, al mismo tiempo, minimizar los riesgos de mercado.
Este modelo comienza con «Construir», donde se desarrolla un producto mínimo viable (MVP) para una idea de negocio. El siguiente paso es «Medir», en el que se utilizan indicadores clave de rendimiento para evaluar el rendimiento de este MVP en el mercado. La fase de «aprendizaje» es el paso final en el que se analizan los datos recopilados, se obtiene información sobre el mercado y se decide si se debe dar un giro (modificar el producto) o perseverar (continuar con el mismo producto). Por ejemplo, Dropbox comenzó con un MVP básico: un vídeo que mostraba cómo funcionaría. Debido al enorme interés que despertaron, «se dieron cuenta» de que existe una demanda en el mercado, lo que llevó a la elaboración del producto que conocemos hoy en día.
La actividad fundamental de una startup es convertir las ideas en productos, medir la respuesta de los clientes y, luego, saber si hay que cambiar o perseverar - Eric Ries
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