La taxonomía de Bloom es un modelo para categorizar los objetivos educativos, con la intención de fomentar el pensamiento de orden superior en la educación, como el análisis y la evaluación de conceptos en lugar de simplemente memorizar hechos.
La taxonomía de Bloom, desarrollada por Benjamin Bloom, se estructura en seis niveles de aprendizaje. Estos niveles, desde el más simple hasta el más complejo, incluyen recordar, comprender, aplicar, analizar, evaluar y crear.
Por ejemplo, en el nivel «Analizar», una persona puede examinar una obra literaria, desglosar sus elementos, identificar patrones, etc. En «Evaluar», podría formarse juicios sobre su valor, tal vez comparándolo con otros trabajos. Por último, en el nivel de «Creación», podría intentar construir su obra original.