Un modelo mental centrado en estrategias para reducir el riesgo de lesiones durante el entrenamiento de fuerza, especialmente para aquellos mayores de 40 años.
Para prevenir lesiones comunes durante el entrenamiento de fuerza, prioriza rutinas adecuadas de calentamiento y enfriamiento, mantén una buena forma durante los ejercicios, aumenta el peso de forma progresiva, escucha a tu cuerpo, incorpora días de descanso y considera la guía profesional si es necesario. Familiarízate con las limitaciones de tu cuerpo y adapta los ejercicios en consecuencia para garantizar la longevidad en tu viaje de acondicionamiento físico.
Un gramo de prevención vale más que un kilo de curación.